sábado, marzo 31, 2007

¿Intolerancia?!!

No fue una sorpresa escuchar el día de ayer a Rafael Rey que la manifestación hecha en rechazo a sus declaraciones y al intento de intervención de la PUCP por parte del Opus Dei, sea un acto de intolerancia. Pero si ha sido sorprendente escuchar a Cecilia Valenzuela y Augusto Alvares Rodrich, decir lo mismo. El caso de Valenzuela es más sorprendente, debido a que su opinión se contradecía con la vertida por su propia reportera segundos antes. ¿Que pasó?
No quiero especular sobre la integridad de las acciones de ambos periodistas. Ambos han demostrado en muchas ocasiones que no temen las repercusiones que les puede causar el decir la verdad. Así que creo que lo que sucede es que el pensamiento conservador se apoderó de sus mentes.
¿Desde cuando hacer una manifestación en la vía pública es un acto de intolerancia? Desde hace algunos años , las manifestaciones públicas han empezado a ser vistas como actos propios de revoltosos y "terroristas", no como un derecho de la sociedad civil, que muchas veces no tiene otra forma de hacer manifiesto su sentir.
La manifestación del día de ayer ha sido una demostración de civismo. Ordenada y pacíficamente, los estudiantes nos dirigimos por la vía pública hasta la supuesta casa de Rafael Rey, en donde con arengas y declaraciones, hicimos notar nuestro sentir con respecto a la intromisión del Opus Dei. Luego ordenadamente nos retiramos. No existió ningún acto de violencia, ni siquiera verbal. Sólo fuimos a decir lo que pensábamos con las únicas herramientas con las que contamos: nuestra voz, nuestra presencia, y algunos carteles y bombos. 500 estudiantes ejercimos un acto democrático. Rechazamos la intolerancia y ahora a nosotros nos llaman intolerantes. Personalmente rechazo esas declaraciones. ¡Y que viva el movimiento estudiantil!

Renace el movimiento estudiantil!!

Hoy día ha renacido el movimiento estudiantil. Luego de varios años, los estudiantes de la Católica, hemos salido a las calles para hacer oír nuestra voz. Cipriani, no te queremos en la PUCP. No queremos represión, no queremos intolerancia, no queremos veto. No queremos el pensamiento retrógrada del Opus Dei. Yno queremos volver a la época de la inquisición.
El día de hoy al menos 500 estudiantes manifestamos lo que pensamos acerca del intento del Opus Dei por controlar nuestra Universidad. Salimos y dimos vueltas por San Isidro. De forma pacifica y ordenada. Nadie nos puede decir que somos intolerantes. Sólo somos intolerantes con la intolerancia.

jueves, marzo 29, 2007

Plantón en casa de Rafael Rey


Viernes 30 de Marzo
Inicio: 3:00pm
Av. El Golf 186 San Isidro
(Preconcentración 1:30pm Estacionamiento frente a Puerta Principal PUCP)

Pronunciamiento Estudiantil de los Estudiantes de la PUCP
Rechazamos la Campaña del Cardenal Juan Luis Cipriani y el Opus Dei Contra nuestra Universidad

La Federación de Estudiantes de la Pontificia Universidad Católica del Perú, los Centros Federados, Centros de Estudiantes y Representantes Estudiantiles ante el Consejo Universitario, como representantes de la Comunidad Universitaria, expresamos nuestro más enérgico rechazo a la campaña emprendida por el Cardenal Juan Luis Cipriani, y por extensión el Opus Dei, para intervenir en nuestra Universidad.

Más allá del tema legal, nos oponemos firmemente al intento de intromisión del Cardenal en la administración de nuestra Universidad, posición que sabemos es personal y no se vincula con la Iglesia Católica como institución, debido a que la posición que actualmente representa – íntimamente vinculada al Opus Dei, tendencia ultra conservadora y altamente excluyente - implicaría:

• La pérdida de la autonomía universitaria –entendida como la facultad de administrar la currícula, la plana docente, administrativa, entre otras-, puesto que el Cardenal ha intentado por diversos medios irrumpir el orden democrático de nuestra universidad, pretendiendo influir en el nombramiento de autoridades y profesores, amenazando la pluralidad académica, característica de nuestra casa de estudios.

• La pérdida de las libertades individuales, entre las cuales destacan, además, el derecho a la elección de una opción política o de una orientación sexual, así como la libertad de expresión y asociación.

• La pérdida de la postura institucional de nuestra Universidad en temas tan importantes para el país como el respaldo a la Comisión de la Verdad y Reconciliación, en la cual se pide justicia a los responsables de violaciones a los derechos humanos, los cuales para Monseñor Cipriani, son intrascendentes (como ha manifestado en reiteradas oportunidades), fomentando con ello la impunidad y el olvido en nuestro país.Sobre este punto, no olvidamos el lamentable papel que cumplieron Monseñor Cipriani y el Opus Dei durante la época de la violencia política y del autoritarismo fujimorista, avalando de manera explícita o implícita las nefastas prácticas que ocurrieron durante esos años.

Asimismo, consideramos que la intención real del Cardenal Cipriani es tener una injerencia en los contenidos de la currícula universitaria; ya que, si su preocupación fuese únicamente constatar la correcta administración de los bienes de la herencia de Don José de la Riva Agüero, como afirma, consideramos inexplicables las reiteradas inasistencias de los representantes del arzobispado en los órganos deliberativos de nuestra universidad como son el Consejo y la Asamblea Universitaria.

Las Mesas Directivas firmantes reafirman su compromiso por la defensa de los derechos humanos y de la pluralidad, así como su rechazo a la impunidad, la intolerancia y a la falta de libertad en nuestro país, lo cual ha sido también bandera institucional de nuestra Universidad, y es precisamente aquello que Monseñor Cipriani y el Opus Dei, definitivamente, NO representan.
EN DEFENSA DE LA DEMORACIA Y LA AUTONOMÍA UNIVERSITARIA
CIPRIANI PERSONA NO GRATA

- Federación de Estudiantes de la Pontificia Universidad Católica del Perú (FEPUC)
- Representantes Estudiantiles ante Consejo Universitario
- Centro Federado de Estudiantes de Administración y Contabilidad
- Centro Federado de Estudiantes de Arquitectura
- Centro Federado de Estudiantes de Ciencias Sociales
- Centro Federado de Estudiantes de Ciencias y Artes de la Comunicación
- Centro Federado de Estudiantes de Derecho
- Centro Federado de Estudiantes de Educación
- Centro Federado de Estudiantes de Estudios Generales Ciencias
- Centro Federado de Estudiantes de Estudios Generales Letras
- Centro Federado de Estudiantes de Letras y Ciencias Humanas
- Centro de Estudiantes de Ciencias e Ingeniería
- Centro de Estudiantes de Psicología
- Centro de Estudiantes de Arte

Pando, 28 de marzo del 2007

Pronunciamiento del Centro Federado de Ciencias Sociales

Aquí publico el comunicado acerca de la disputa Cipriani - PUCP. Pronto traeré más noticias.

Rechazamos campaña del Arzobispado y el Opus Dei contra nuestra Universidad

La Mesa Directiva del Centro Federado de Ciencias Sociales de la Pontificia Universidad Católica del Perú, como parte de la Comunidad Universitaria, expresa su más enérgico rechazo a la campaña emprendida por el Arzobispado de Lima Juan Luis Cipriani, y por extensión el Opus Dei, para intervenir en nuestra Universidad.

Más allá del tema legal, nos oponemos firmemente a una administración del Arzobispado, debido a que la posición que actualmente representan –a todas luces íntimamente vinculadas al Opus Dei, rama ultra conservadora y altamente excluyente dentro del catolicismo románico apostólico- implicaría:

1) La pérdida de la pluralidad académica en la Universidad, algo por lo cual nuestra Universidad se ha caracterizado. Esto puede apreciarse en Universidades bajo dominio del Opus Dei, en la cual se llega al extremo de vetar profesores, cambiar currículas para ceñirlas a un pensamiento único o censurar determinados libros, como si los estudiantes careciéramos de conciencia crítica.

2) La pérdida de las libertades individuales, entre las cuales destacan, además de las expuestas en el punto anterior, el derecho a la elección y expresión de una opción política y de una orientación sexual determinada.

3) La pérdida de una postura institucional de nuestra Universidad en temas tan importantes para el país como el del respaldo a la Comisión de la Verdad y Reconciliación, en la cual se pide justicia a los responsables de violaciones a los derechos humanos, los cuales, para Monseñor Cipriani, son una “cojudez”, fomentando con ello la impunidad y el olvido en nuestro país.

Sobre este punto, no olvidamos el lamentable papel que cumplieron Monseñor Cipriani y el Opus Dei durante la época de la violencia política y del autoritarismo fujimorista, avalando de manera explícita o implícita las nefastas prácticas que ocurrieron durante esos años.

La Mesa Directiva del Centro Federado de Ciencias Sociales reafirma su compromiso en la defensa de los derechos humanos, así como su rechazo a la impunidad y a las faltas de libertades en nuestro país, lo cual ha sido también bandera institucional de nuestra Universidad, y es precisamente aquello que Monseñor Cipriani y el Opus Dei NO representan.

Mesa Directiva
Centro Federado de Ciencias Sociales
Pontificia Universidad Católica del Perú

lunes, marzo 26, 2007

¿Hacia un marximo libertario?

El otro día conversaba con un amigo acerca del socialismo. En realidad una conversación muy corta en la que comentamos acerca de las últimas percepciones o alcances que había tenido cada uno en su búsqueda del socialismo. Creo que ambos partimos de la premisa de que el socialismo tal cual está planteado actualmente, no alcanza a responder todos las vicisitudes que plantea la realidad social, y que sólo un replanteamiento de sus postulados, podría darnos luces acerca de las cosas que se deben hacer.
¿Porque Socialismo? Porque, como sostenía Marx, el capitalismo resulta ser un sistema incoherente. Donde por un lado (el ideológico) se exalta la igualdad, pero por otro (el productivo), cada ves más gente termina siendo excluida. El problema de la apropiación de los excedentes de la producción, tal como fue planteado por Marx, sigue vigente, y lo seguirá mientras exista el capitalismo, porque es parte de su esencia. Pero lo que se debe replantear es la forma en como se solucionará el problema.
En ese sentido, en mis reflexiones y lecturas he encontrado una postura interesante a la cual descubrí por primera vez leyendo a Marcuse (un prominente filósofo y sociólogo de la Escuela de Frankfurt). Se trataba de una visión individualista del marxismo. Siempre se le ha achacado al socialismo el ser una doctrina totalitaria, de colocar al individuo por debajo de los intereses de la "sociedad" (muchas veces confundida con el partido), y de ser antidemocrático. Lo que argumentaba Marcuse en "Razón y Revolución" es que Marx buscaba justamente evitar esa nueva oposición, entre el individuo y el Estado. Yo lo entendí de la siguiente forma: el objetivo es que el Estado se convierta en la expresión del pueblo. Ello sólo es posible en un contexto completamente democrático, en el que se contrapongan los intereses del estado a los del pueblo.
Esto es muy difícil de lograr. Toda organización existe en torno a su propia lógica, es decir, el Estado siempre va a responder ante sus propios intereses y no ante los del pueblo. Para ello, creo que es necesaria la eliminación del Estado, en la forma en como lo entendemos actualmente, hacia la creación de una organización popular autogestionada. Esta sería una nueva forma de estado, en donde este se confunde con el pueblo mismo, es el pueblo mismo. Creo que esa es la idea detrás del llamado marxismo libertario. Se trata de encontrar el papel del individuo, como actor principal de la transformación social. El individuo forma parte de la organización, no se opone a ella. En ese sentido es necesario un sistema completamente democrático para la existencia de un estado así.
Creo que un acercamiento a este Socialismo libertario se puede apreciar en todo el movimiento por la cultura libre, o el software libre. Es el individuo autorganizándose en comunidades en un contexto democrático. Hay mucho que reflexionar aún.

Más sobre el tema:

domingo, marzo 25, 2007

Sobre marxistas y comunistas

El día de hoy salió publicada en Perú 21 unas declaraciones en las que Rafael Rey pedía a la PUCP que deje de formar "marxistas y comunistas" (Perú 21, 25/03/2007) ya que las consecuencias de esas doctrinas las hemos visto en Huamanga. Hay que decir las cosas claras. Las indignantes declaraciones de Rey tienen como objetivo echarle más leña al fuego (asi como el diario Expreso y A. Mariátegui) que ha causado este asunto de la herencia de Riva Agüero y la lucha por el control de la PUCP. Rey sólo le está haciendo el juego al Gran Canciller atizando a la opinión pública con el terrorismo. Es decir, pretende insinuar que podría existir un rebrote terrorista en la PUCP (conocida practica fujimorista la de atizar los temores) producto de su pluralismo, y que para solucionarlo, el cardenal debería entrar para que se enseña la "verdadera" doctrina cristiana.
En primer lugar, la PUCP no forma marxistas ni comunistas. Que hayan estudiantes marxistas y comunistas es otras cosa, ya que como en cualquier universidad, las tendencias políticas, ideológicas y religiosas son cosa que le corresponde a la intimidad de cada uno. Si es cierto que se enseñan las teorías de Marx, o que en sociología se estudian textos y autores que pertenecen a la escuela marxista de la sociología; pero eso no supone, como pretende insinuar Rey, que se enseñe o se incite a la violencia. Hay que distinguir claramente el marxismo del pensamiento gonzalo. El primero es producto de un análisis académico del capitalismo, centrado en sus consecuencias sociales. El segundo es una doctrina totalitaria que cree que aterrorizando y asesinando a la gente se va a lograr un mundo mejor. Mientras que la primera busca la liberación del individuo; en la segunda el individuo no existía, o sólo estaba al servicio de los intereses de un "hombre" (entre comillas porque Abimael con las justas puede ser llamado hombre). También es necesario rescatar que el marxismo no es sólo una corriente ideológica sino una escuela científica, con métodos propios para estudiar la realidad.
Que no venga Rey a querer confundirnos. El marxismo no es igual a la violencia. El concepto de lucha de clases no se refiere a actos terroristas, sino al antagonismo de intereses que se produce en toda sociedad al respecto de la apropiación de los excedentes de la producción. Que no se meta en donde no le importa. La universidad católica es una universidad plurar, como toda universidad católica debería ser. Que no nos metan el viejo cuento de que "existe" un tipo de "universidad católica". Lo único que logra esa premisa es oponer a la iglesia con el desarrollo del conocimiento. Creo que ya estamos lejos de los tiempos de la inquisición para hablar de una "correcta educación católica". No tengo nada más que decir.

Otras opiniones:



viernes, marzo 23, 2007

Vamos a Tocache!!

Bueno, desde mi humilde punto de vista quería agregar algunas percepciones al asunto de la hoja de coca. No enfocarme específicamente en el acta firmada en los días anteriores, sino en el problema de la hoja de coca en general. En concreto, si es que se debe erradicar o no la hoja de coca, y la relación que mantiene la producción con el narcotráfico.
Sería imposible negar que existe una sobreproducción de hoja de coca en el país, y que la mayor parte de esta tiene como destino las posas de maceración, en donde se produce la PBC y demás. Pero lo que si se puede cuestionar son las razones por las que esto es así. Desde un punto de vista, los cocaleros se encuentran aliados con los narcotraficantes (es decir, serían su vitrina o pantalla legal) y buscan usar todos los medios posibles de presión para mantener el status quo en la zona. Los que sostienen esta postura están a favor de la erradicación, ya que consideran que sería imposible negociar con ellos. Es la postura que se ha aplicado como política de erradicación de los cultivos en el país.
Desde otro punto de vista, los cocaleros se ven "obligados" a vender sus hojas de coca a los narcotraficantes porque el resto de productos no son rentables, mientras que la hoja de coca si, es decir, a causa de su pobreza no les queda más remedio que aliarse con el narcotráfico para subsistir.
Ninguna de las dos posturas es completamente cierta. Es verdad que existen cocaleros que se encuentran aliados con los narcotraficantes, así como también es verdad que la pobreza en la zona es bastante extrema (44% de pobres extremos en declaraciones de Nancy Obregón en el programa "La hora N" 23/03/07). El problema tiene mayores alcances.
A mi parecer la sobreproducción tiene una causa más preocupante. Se debe a que el Perú como país es incapaz de industrializar su producción de coca. Si, existen varios estudios recientes que demuestran que es posible. En ecuador, se está produciendo una gaseosa (así como Cocacola, que se produce con coca), y aquí en el Perú tenemos Vortex, una bebida energética como el Red Bull. Pero existe un limitante, y es una resolución de la ONU que coloca a la hoja de coca como un estupefaciente, con lo cual se convierte en un bien incapaz de ser exportado, o sobre el cual realizar investigaciones científicas. En ese sentido, creo que es fundamental como un primer paso para la política antidrogas, apoyar el pedido de Bolivia de despenalizar a nivel mundial la hoja de coca, para así poder exportar estos productos y tener un destino legal a nuestra hoja de coca, la hoja sagrada de los incas.

Algunos links:
  • http://golpedegato.blogspot.com/2006/09/harina-de-coca-primer-estudio.html
  • http://www.jaimegorenstein.com/index.php?option=com_content&task=view&id=560&Itemid=574

Renovación

Bueno, este blog ha sido objeto de una nueva renovación. Espero que esa renovación vaya más allá de los aspectos estéticos y también marque una nueva etapa en el desarrollo de los artículos. Por lo pronto el diseño aún no me convence del todo... Pero por ahí estamos =D

domingo, marzo 11, 2007

Organización Popular

Es una condición necesaria para la construcción del Socialismo fortalecer una verdadera organización popular. No una estructura estatal, que funcione para el pueblo, sino bajo la formula de Linconl, una organización del pueblo para el pueblo. Que la conforme el pueblo mismo. Tampoco siguiendo la tesis de Lenin, de construir un partido de "vanguardia" que guie al pueblo por el camino correcto. De esa forma sólo se consigue construir una masa que sigue a alguien que se autodenomína como lider. Además, se parte de la concepción de que el pueblo no es lo suficientemente capaz para conocer el camino, sino con un grupo selecto de hombres (el partido) son los únicos que pueden conocer el camino correcto. Lo único que se logra es repetir las jerarquías entre las personas, establecer una nueva diferencia de clases, ya no entre los que tienen la propiedad de los medios de producción, sino entre quienes tienen el conocimiento. Las experiencias de Rusia, China y Cuba nos dan muestra de ello. Al construir una aparato, ya sea estatal o partidario (o a veces ambos) sobre el pueblo, lo que se logra es crear una nueva forma de opresión; cuando de lo que se trata en el Socialismo es eliminar toda forma de dominación de los hombres sobre los hombres. Además, estas organizaciones tienden a desconectarse del pueblo, entrando en una propia dinámica, en la que se busca la permanencia de la organización en si, y no el beneficio del pueblo. Por poner un ejemplo: mientras estuve en Curahuasi y se buscaba convocar a los padres para realizar los talleres, se intentó en primer lugar a través del municipio, lo cual terminó siendo un fracaso, el municipio no tenía verdadero interés en el tema. Sin embargo, cuando se conversó con las juntas vecinales (conformada por los mismos padres) la convocatoría pudo haber funcionado (finalmente no se aplicó por falta de tiempo del nosotros mismos, que debiamos volver a Lima); ya que existía un verdadero interes ya que los beneficiarios del proyecto serían ellos mismos.
En ese sentido, la formula original de Marx resulta mucho más interesante. El nuevo gobierno debe ser de obreros sobre los obreros mismos, entre iguales y de forma democrátrica. La forma de lograr eso es fortaleciendo las organizaciones populares, sean estas sindicatos, federaciones estudiantiles, o juntas vecinales. El pueblo organizandose a si mismo. El problema es que toma tiempo, generaciones quizas, no es un cambio "revolucionario", si se entiende por eso un cambio de la noche a la mañana. Es un cambio progresivo y que requiere mucho aprendizaje. Pero sólo de esa manera se puede construir el socialismo. Ya que tiene que ser por el interes mismo del pueblo, por su voluntad, y no por la voluntad de un partido. La imposición del socialismo por una minoría es una contradicción a la misma esencia del socialimo. Este se debe construir.

Autonomía

Actualmente me encuentro trabajando en un proyecto de desarrollo, sobre el tema de la educación sexual. Como parte de nuestro método nos enfocamos en el trabajo con los jóvenes, y uno de los objetivos en la creación de grupos locales, que puedan realizar seguimiento a los objetivos y realizar sus propios proyectos. Es decir, se busca empoderar a los actores locales para que luego de la salida del grupo original, estos tengan la capacidad para continuar el proyecto por sus propios medios. Con el grupo hemos realizado un proyecto piloto en la localidad de Curahuasi en Abancay, en la última semana se comenzó con la creación del grupo local, con los jóvenes líderes que se habían identificado en la realización de los talleres. Pero apenas se oficializó la creación del grupo comenzó una discusión entre los miembros del proyecto. La discusión era obvia y previsible, que tanta autonomía tendría este grupo con respecto al grupo original de Lima
Mi posición puede ser radical. Considero que el nuevo grupo debe tener la mayor cantidad de autonomía posible respecto a la central de Lima. Para permitir el empoderamiento de una población, y fomentar la autonomía (parte de los objetivos del proyecto) se planteo un trabajo igualitario. Si se jerarquiza la relación entre ambos grupos, de tal manera que el grupo local se sujete a los estatutos del grupo en Lima, no se cumplen esos objetivos. Ellos deben tener su propio estatuto de acuerdo a sus propias reglas. No es posible la imposición de reglas ni nombres que no hayan salido por consenso. A partir de ahora son dos organizaciones iguales, que deben trabajar en una asociación y no bajo la imposición de una sobre la otra. Sino, se repite el viejo esquema de que desde Lima se imponen las decisiones centralizadamente, justo el esquema que pretende romper este proyecto.
El problema es simple, si se busca empoderar a una población, no se puede comenzar diciendoles que es lo que hay que hacer, ni como hacer las cosas. A lo mucho se puede guiar. Pero para que haya autonomía de verdad, deben caminar sólos.

Informática y Socialismo

Marx analizó un punto central de la economía capitalista, la creación del valor. La ganancia no se encuentra en la diferencia entre el precio de venta (o valor de cambio) y el valor en si de la mercancía (es decir, lo que se podría llamar el costo de la mercancía, lo que cuesta producirla). La creación del valor se encuentra en el proceso mismo del trabajo. La ganancia es obtenida por el trabajo no remunerado del obrero. Esto se debe a que la fuerza de trabajo del obrero es un tipo de mercancía especial, ya que su valor de cambio es menor a su valor de uso (el valor de la mercancía aplicada, o lo que puede producir esta). Es decir, la fuerza de trabajo de un obrero produce más que lo necesario para que esta vuelva a producirse. Esta diferencia es la llamada plusvalía, y debido a que el capitalista compra la fuerza de trabajo por su valor de cambio; se apropia de esa diferencia, entre el valor de uso y el valor de cambio de la fuerza de trabajo.
En el mundo de la informática sucede de la misma forma. La fuerza de trabajo del programador es apropiada por las grandes corporaciones. Pero lo que cambia la situación es que los trabajadores producen un tipo de mercancía diferente. Una mercancía virtual, en el sentido de que esta no existe físicamente. Se ha pasado de producir alfileres a producir códigos de computadora. Y estos códigos, al ser información o una forma de conocimiento se encuentra unidos a su creador. Una mercancía física es sencilla de apropiar, pero la apropiación de conocimiento es más difícil. El conocimiento no puede ser simplemente pasado de una persona a otra, sino que sólo puede ser cedido, de tal manera que ambas partes lo poseen de la misma forma. No existe forma de que algo que alguien ya conoce sea eliminado de la mente de esa persona, así como tampoco de que alguien ceda parte de su conocimiento si es que esta persona no lo desea. De tal manera que los obreros crean un producto que primero les pertenece a ellos, que sólo puede ser cedido a un tercero si es que ellos lo desean y que de todas formas ellos siempre lo van a “poseer” (ya que está en sus mentes). Los obreros se vuelven ahora creadores y son de cierta forma inseparables de su creación.
Pero el capitalismo buscó la manera de mantener esta propiedad y así comenzó la aplicación de los derechos de autor o derechos de propiedad en el mundo de la informática. La única forma de detener a un obrero (programador) de usar un código que el mismo creo, es a través de la implantación de una limitación legal. Las corporaciones se apropiaban de los códigos de sus programadores (estos firmaban contratos en los que cedían sus derechos sobre sus códigos a estas), y limitaban el uso de estos a la forma que ellas deseaban, o bajo las condiciones que ellas pusieran. El obrero que usaba el código fuera de las condiciones impuestas por las corporaciones se tenía que ver enfrascado en una demanda legal.
Pero esta forma de apropiación resulta muy frágil. A diferencia de la etapa industrial, en donde la apropiación de los medios de producción era un hecho de la realidad; en la era de la información la apropiación sólo es posible bajo la creación de barreras o límites que no forman parte de la esencia de la mercancía. Los medios de producción de la era industrial no podían ser apropiados por los obreros simplemente porque querían, se veían obligados para hacerlo de la aplicación de algún tipo de fuerza. Esto se debe en parte a que esos medios no eran suyos (la propiedad de ellos era de los capitalistas). Pero en cambio, para apropiarse de los códigos, simplemente deben usarlos. Ya que su propiedad sólo se sustenta en un artilugio legal. El conocimiento no puede ser apropiado, no es parte de su esencia.
El poder sobre ese conocimiento se encuentra ahora en los obreros, o los creadores. Los productores del código y no en sus propietarios, ya que su exclusividad sobre estos medios se sustenta sólo en medios legales. Los creadores son los que tienen el poder sobre ese conocimiento, y tienen dos opciones. Cederlas ante las corporaciones que impondrán sus limitaciones o cederlas ante el mundo, de tal manera que todos puedan hacer uso de ellas. También podrían quedarse el conocimiento para si mismos, pero un conocimiento no tiene finalidad si es que no puede ser compartido.
El fenómeno de Linux es una muestra de ello, en donde los trabajadores decidieron liberar sus códigos al mundo, para que todos colaboren con la creación de una mercancía para beneficio de la humanidad en si misma. No existe propiedad sobre esos códigos, ya que la única forma de apropiarse de ellos es en base a una legalidad fácilmente quebrantable por cualquiera en el mundo (sólo basta usar la herramienta copiar). Es la formación de una economía socialista. Donde todos trabajan para todos, y la propiedad es de todos y es de nadie. No existe el valor de cambio, es decir no existe el intercambio monetario. La ganancia es apropiada entre todos por igual, el la forma de un producto, una mercancía en constante crecimiento.